LOS PROFES EN LA CALLE.
FELIPE MARTÍNEZ LÓPEZ.
Publicado en el diario Tiempo, 23 de mayo de 2008.
De nueva cuenta, mientras casi un millón trescientos mil niños han visto destruidas sus posibilidades educativas, los profesores de la Sección 22 vuelven a los “acostones” y a cerrar escuelas, algunos porque tienen que venir al zócalo de Oaxaca y otros, porque en su barbarie no permiten que los de la Sección 59 sí trabajen y abran sus escuelas.
Mientras muchos se desgarran las vestiduras, habría que hacer algunas aclaraciones con respecto al movimiento de este año.
En primer lugar, no veo que exista riesgo alguno de que el conflicto sindical se desborde y asume características de confrontación política. El pariente Enrique Rueda está becado en Canadá y no puede hacerle el caldo gordo a ningún ex gobernador que quiera cobrar afrentas porque le despidieron a “La Mojarrita”. El dueño del periódico Noticias ya no tiene una huelga en las puertas de su oficina y ya “amarró” un contrato mensual con el gobierno del Estado. El EPR anda más preocupado tratando de que les regresen a sus “desaparecidos” y no en impulsar a sus grupos periféricos a la movilización política. Vicente Fox y sus fobias posProzac ya no cobra como presidente de la República y López Obrador anda encabezando a sus “adelitas”, pero para mantener la precandidatura futurista a una nueva carrera presidencial. Esto se lee como un cambio de la coyuntura política, para quienes les interese saber algo de ciencia política.
En segundo lugar: los dirigentes de la Sección 22 tienen su interés puesto en la expedición de la convocatoria para el cambio de mesa directiva, pero sin condiciones; es decir, que doña Elba Esther Gordillo no les imponga el reconocimiento a la Sección 59. No pelean tanto por los incrementos salariales, eso ya lo tienen en la bolsa desde el año pasado y lo que falte lo pondrá el pueblo de Oaxaca, mediante el pago de los intereses y créditos bancarios que el gobierno estatal ya negoció.
En tercer lugar: Los neófitos del gobierno estatal ya despachan en áreas que no afectan a las negociaciones sindicales magisteriales. Aquel Coordinador General del COPLADE a quien se le hizo mucho pagar 12 millones en la puja para completar la bolsa magisterial en 2006, ahora es asesor del gobierno, pero para impulsar un supuesto plan de desarrollo de la región sur-sureste; el Secretario General de Gobierno que pensó en enchilarse la torta sin una previa preparación de los ingredientes, ahora vuelve a despachar en el área electoral, aprendiendo que, en política, los triunfos se ganan con preparación previa y por lo menos con un año de antelación. Pero, lo más importante es que Roberto Madrazo ya no está en campaña y el gobierno del Estado puede dedicarse a las actividades que le corresponden: gobernar, que implica hacer política, entendida como el establecimiento de una compleja red de relaciones de convivencia, acuerdos y compromisos.
Por último, los empresarios que se jalan los cabellos porque el gordito Flavio Sosa anuncia la posible suspensión de la guelaguetza, debían tener presentes que ellos no son el pueblo oaxaqueño y la riqueza de Oaxaca no solo la aporta la iniciativa privada. La riqueza social de Oaxaca está más allá de los gastos suntuarios de los espectáculos mediáticos confundidos como la cultura oaxaqueña.Por lo demás, este asunto está más que manoseado y su final es previsible: más dinero para los líderes magisteriales, debilitamiento de la sección 59 y un empate en el medio campo de la política sucesoria del gobierno estatal.