FELIPE MARTÍNEZ LÓPEZ
Publicado en el periódico Tiempo, de Oaxaca, Oax., el 19 de abril de 2009.
René Arce Islas es un senador del PRD, miembro de la corriente Nueva Izquierda, la misma corriente que le disputó la presidencia del CEN del PRD al “Peje” López Obrador y le ganó. Desde hace quince años vive del erario, saltando de curul en curul. Sin embargo, su verdadero nombre no es ese. Antes se llamaba Óscar Nahum Círigo Vásquez. En esa época, al parecer, estaba profundamente vinculado con la guerrilla mexicana, pero también trabajaba para la Secretaría de Gobernación.
Dice la revista “Reporte Índigo”: “Tarde descubrieron los hoy miembros del EPR que Óscar Nahum trabajaba para el gobierno priista. Su misión era realizar acciones de contrainsurgencia al interior de las organizaciones de izquierda. Se afirma que finalmente los grupos de izquierda detectaron la presunta infiltración de René Arce. Ante este tipo de hallazgos, habitualmente surgen reacciones violentas que incluyen ejecuciones. Pero el “infiltrado” tenía el manto protector de Fernando Gutiérrez Barrios. Y después el de su poderoso heredero: el senador Manlio Fabio Beltrones. Fue Gutiérrez Barrios el que le creó una nueva personalidad a Nahum a quien desde entonces se conoce como René Arce Islas.” (Letras libres, agosto 2007, número 104).
Según muchos perredistas, Arce Islas es uno de los artífices de la crisis del PRD. Como apoyo y organizador, el senador tiene un hermano que cobra como diputado local y preside la Comisión de Gobierno de la Asamblea Legislativa del DF; ese mantiene los apellidos, es Víctor Hugo Círigo Vásquez. Entre ambos, lograron crear una compleja red de lealtades y servidumbre en la delegación más conflictiva del Distrito Federal, pero también donde se refugian y se desarrolla el hampa más agresiva y organizada de la capital del país: la delegación Iztapalapa.
Desde siempre, los hombres cercanos a los hermanos Círigo dirigieron esa delegación política, solo que, como casi siempre ocurre, ahora les ganó la ambición y ya no quisieron más testaferros, en lugar de eso, propusieron directamente a la esposa del diputado local como candidata a delegada. Solo que se les atravesó otra tribu perredista más atrabancada, corrupta y organizada: la Izquierda Unida que comanda el “Señor de la Ligas”, el profesor René Bejarano, el mismo que recibía los fajos de dólares de manos de los contratistas de las obras del Distrito Federal en la época en que López Obrador hacía su “cochinito”, antes de lanzarse a la candidatura por la presidencia de la República.
Toda esta pequeña historia viene a colación, porque los hermanos Círigo son oriundos de Oaxaca. De aquí salieron huyendo en aquella época cuando un grupo de iluminados –por aquello de los Sederos Luminosos del Perú- creyeron que era posible instaurar una ínsula guerrillera en la Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca, bajo el mando del doctor Felipe Martínez Soriano. Para su fortuna, se refugiaron en el Distrito Federal y ahí hicieron carrera política, entre la Secretaría de Gobernación y las filas de la izquierda oficial.
Otros muchos no tuvieron la suerte de ellos. Aún recuerdo la cruenta historia de la familia Cortés Gutiérrez, esos mismos que iniciaron la Organización Netzahualcóyotl, que fue la organización periférica en la que se incubó la Unión del Pueblo y su PROCUP en la UABJO. Después del desastre militar de la organización, Arturo Cortés Gutiérrez fue detenido y liberado casi inmediatamente, reincorporándose a la Universidad. No pasó mucho tiempo y toda la familia fue ejecutada, incluyendo a las esposas.
Un medio hermano de Felipe Martínez Soriano llegó, muchos años después, a la rectoría de la Universidad. Desde ahí, Francisco Martínez Neri apoyó a la APPO. Al concluir su periodo fue contratado como director general de pagos de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, lugar donde despacha Víctor Hugo Círigo Vásquez como presidente de esa institución. Por eso, no fue extraño que el único candidato a diputado uninominal seguro del PRD fuera el ex rector de la UABJO, para contender en la octava circunscripción. Debemos recordar que los dirigentes estatales perredistas, Lenin López y Amador Jara, apoyaron a los “Chuchos”, de quienes forman un importante pilar los Círigo Vásquez.
Lo que muy pocos sabemos es que los Círigo tienen otro hermano en Oaxaca, Jorge Luis Círigo Vásquez, el mismo que ha creado una pujante organización basada en apoyos económicos y prebendas políticas. Su fuerza organizativa ya le brindó los primeros frutos. Como parte de los acuerdos políticos, su esposa, Bárbara García Chávez, despacha como regidora de Equidad y Género en el ayuntamiento municipal de esta ciudad. Hace unos días, el matrimonio participó en un raro conflicto. Sus corifeos publicitaron una afrenta contra la señora, porque la denostaron en un panfleto político. Quienes siguen estos asuntos comentaron que el problema se suscitó porque la Secretaría General de Gobierno no cedió a la demanda de recursos que Jorge Luis Círigo exigía. Por eso la virulencia política de un asunto verdaderamente intrascendente.
Publicado en el periódico Tiempo, de Oaxaca, Oax., el 19 de abril de 2009.
René Arce Islas es un senador del PRD, miembro de la corriente Nueva Izquierda, la misma corriente que le disputó la presidencia del CEN del PRD al “Peje” López Obrador y le ganó. Desde hace quince años vive del erario, saltando de curul en curul. Sin embargo, su verdadero nombre no es ese. Antes se llamaba Óscar Nahum Círigo Vásquez. En esa época, al parecer, estaba profundamente vinculado con la guerrilla mexicana, pero también trabajaba para la Secretaría de Gobernación.
Dice la revista “Reporte Índigo”: “Tarde descubrieron los hoy miembros del EPR que Óscar Nahum trabajaba para el gobierno priista. Su misión era realizar acciones de contrainsurgencia al interior de las organizaciones de izquierda. Se afirma que finalmente los grupos de izquierda detectaron la presunta infiltración de René Arce. Ante este tipo de hallazgos, habitualmente surgen reacciones violentas que incluyen ejecuciones. Pero el “infiltrado” tenía el manto protector de Fernando Gutiérrez Barrios. Y después el de su poderoso heredero: el senador Manlio Fabio Beltrones. Fue Gutiérrez Barrios el que le creó una nueva personalidad a Nahum a quien desde entonces se conoce como René Arce Islas.” (Letras libres, agosto 2007, número 104).
Según muchos perredistas, Arce Islas es uno de los artífices de la crisis del PRD. Como apoyo y organizador, el senador tiene un hermano que cobra como diputado local y preside la Comisión de Gobierno de la Asamblea Legislativa del DF; ese mantiene los apellidos, es Víctor Hugo Círigo Vásquez. Entre ambos, lograron crear una compleja red de lealtades y servidumbre en la delegación más conflictiva del Distrito Federal, pero también donde se refugian y se desarrolla el hampa más agresiva y organizada de la capital del país: la delegación Iztapalapa.
Desde siempre, los hombres cercanos a los hermanos Círigo dirigieron esa delegación política, solo que, como casi siempre ocurre, ahora les ganó la ambición y ya no quisieron más testaferros, en lugar de eso, propusieron directamente a la esposa del diputado local como candidata a delegada. Solo que se les atravesó otra tribu perredista más atrabancada, corrupta y organizada: la Izquierda Unida que comanda el “Señor de la Ligas”, el profesor René Bejarano, el mismo que recibía los fajos de dólares de manos de los contratistas de las obras del Distrito Federal en la época en que López Obrador hacía su “cochinito”, antes de lanzarse a la candidatura por la presidencia de la República.
Toda esta pequeña historia viene a colación, porque los hermanos Círigo son oriundos de Oaxaca. De aquí salieron huyendo en aquella época cuando un grupo de iluminados –por aquello de los Sederos Luminosos del Perú- creyeron que era posible instaurar una ínsula guerrillera en la Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca, bajo el mando del doctor Felipe Martínez Soriano. Para su fortuna, se refugiaron en el Distrito Federal y ahí hicieron carrera política, entre la Secretaría de Gobernación y las filas de la izquierda oficial.
Otros muchos no tuvieron la suerte de ellos. Aún recuerdo la cruenta historia de la familia Cortés Gutiérrez, esos mismos que iniciaron la Organización Netzahualcóyotl, que fue la organización periférica en la que se incubó la Unión del Pueblo y su PROCUP en la UABJO. Después del desastre militar de la organización, Arturo Cortés Gutiérrez fue detenido y liberado casi inmediatamente, reincorporándose a la Universidad. No pasó mucho tiempo y toda la familia fue ejecutada, incluyendo a las esposas.
Un medio hermano de Felipe Martínez Soriano llegó, muchos años después, a la rectoría de la Universidad. Desde ahí, Francisco Martínez Neri apoyó a la APPO. Al concluir su periodo fue contratado como director general de pagos de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, lugar donde despacha Víctor Hugo Círigo Vásquez como presidente de esa institución. Por eso, no fue extraño que el único candidato a diputado uninominal seguro del PRD fuera el ex rector de la UABJO, para contender en la octava circunscripción. Debemos recordar que los dirigentes estatales perredistas, Lenin López y Amador Jara, apoyaron a los “Chuchos”, de quienes forman un importante pilar los Círigo Vásquez.
Lo que muy pocos sabemos es que los Círigo tienen otro hermano en Oaxaca, Jorge Luis Círigo Vásquez, el mismo que ha creado una pujante organización basada en apoyos económicos y prebendas políticas. Su fuerza organizativa ya le brindó los primeros frutos. Como parte de los acuerdos políticos, su esposa, Bárbara García Chávez, despacha como regidora de Equidad y Género en el ayuntamiento municipal de esta ciudad. Hace unos días, el matrimonio participó en un raro conflicto. Sus corifeos publicitaron una afrenta contra la señora, porque la denostaron en un panfleto político. Quienes siguen estos asuntos comentaron que el problema se suscitó porque la Secretaría General de Gobierno no cedió a la demanda de recursos que Jorge Luis Círigo exigía. Por eso la virulencia política de un asunto verdaderamente intrascendente.
Lo peor del caso es que el mismo Jorge Luis Círigo es el seguro candidato suplente a la diputación federal que encabezará el perredista Francisco Martínez Neri. Una verdadera maraña familiar, pero con amplios respaldos económicos y políticos de los más raros del país.